con seis ducados arrugados y un par de botas medio rotas se camina
mejor; te besaré la nuca mientras miras saltar, las olas entre las farolas
del malecón, ponte el liguero que por reyes te regalé, ven a la cama,
nos persigue el amanecer.
Un corazón que está tan lleno como un vertedero
un trabajo que lentamente te mata
contunsiones, moretones que no se curarán
pareces tan cansada, infeliz...
un
amor
cayó
del
cielo
pregunto
más,
mis
sueños
nunca
pierdo
la
oportunidad.
los besos de ti son robados. Tal vez te quisiera comer y saciarme de ti pues
no se hasta cuando te vuelva a tener. Tal vez porque no decidiste quedarte
conmigo quiza tengo que resignarme a escaparme contigo no sé si la próxima
vez me aprisiono de ti y te fundes en mi y no te vas de mi. Pues voy a procurar
que mis caricias se deslicen hasta el fondo de tu alma, que todo la humedad
de cada beso que nos damos sea un suspiro que nos lleve al infinito. Tal vez
nuestra estrella te llegue a convencer...
...que amores como este no se deben de perder. ♫ ♥
Algo no va bien lo siento dentro,la verdad no está lejos de mí,no lo puedes negar.
Cuando apago las luces cuando cierro mis ojos,la realidad me abruma,estoy viviendo
una mentira.Cuando estoy sola me siento mucho mejor,cuando estoy cerca tuyo...
Te comportas de acuerdo
con lo que te dicta, cada momento
y esta inconstancia, NO ES ALGO HEROICO
ES MAS BIEN ALGO ENFERMO.
No quiero soñar mil veces las mismas cosas,
ni contemplarlas sabiamente,
quiero que me trates suavemente.
Tenía los pies diminutos, y, unos, ojos, color verde marihuana, a los catorce fue reina del instituto, el curso que repetí. Las del octavo derecha dijeron: otra que sale rana, cuando, en crónicas marcianas, la vieron haciendo streap-tease. En sus quimeras de porcelanas conquistaba a al pacino. Los del rayo no éramos gran cosa para su merced. Si, la chiquita de mariquita Pérez, tuviera un buen padrino, los productores, que saben de mujeres, le darían un papel. Pezón de fresa, lengua de caramelo, corazón de bromuro, supervedette, puta de lujo, modelo, estrella de culebrón. Había futuro, en las pupilas hambrientas de los hombres maduros, enamorarse, un poco más de la cuenta,
era una mala inversión. Debutó de fulana de tal en un vil melodrama, con sus veinte minutos de fama retiró a su mamá, el guión le exigía, cada vez, más escenas de cama.
Todavía, por Vallecas, la llaman: Barbi superestar. La noche antes de la noche de bodas arrojó la toalla, el novio, con un frac pasado de moda, enviudó ante el altar. Mientras, barbi, levitaba, en la harley de un chulo de playa, que, entre el tarot, corto maltés y Bob marley, Le propuso abortar. Al infierno se va por atajos, jeringas, recetas. Ayer, hecho un pingajo, me dijo, en el tigre de un bar: ¿dónde está la canción, que, me hiciste, cuando eras poeta? terminaba tan triste que nunca la pude empezar. Por esos labios, que sabían a puchero de pensiones inmundas, Habría matado yo, que, cuando muero, ya nunca es por amor. Se masticaba, en los billares, que, el rayo, había bajado a segunda, por la m-30, derrapaba el caballo de la desilusión.